viernes, 5 de octubre de 2007

el tiempo del olvido



















Simplemente no fui yo el causante.
¿O tal vez ahora no recuerdo que lo fuera?,
¡qué más da!

Lo negaré cuantas veces haga falta.
La culpa es exclusivamente suya
y del tiempo y el hastío mientras convivimos en aquella casa azul y gris.
Y fría.

No ha pasado mucho tiempo desde entonces.
Lo cierto es que no puedo dormir,
que tengo pesadillas en las que me confieso culpable
ante mí mismo.

Me prometí olvidarla
y no hurgar en mis sentimientos
y sé que si busco la paz y el sosiego
no deberé llamar a su puerta.

Pero ya se habrá ido,
habrá llenado su maleta de ilusiones amargas
y se habrá marchado bien lejos.
Estoy tan seguro de ello que tendré que expiar mi culpa,
arrepentirme de mi triste derrota solo y desvencijado.

Aquí en estas líneas desesperadas
voy a desvelar cuanto sé y recuerdo.
Si algún día la veis preguntadle
si se trata de un delirio o si miento.

Ayudadme a resolver mi tormento, ¡por favor!
Algún día tendré que entenderlo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo sí puedeo pensar en alguien

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.